El ciclista eslovaco Peter Sagan
(Liquigas) se anotó este viernes su tercera victoria del Tour de Francia
2012 al imponerse al esprint en la sexta etapa disputada entre las
localidades francesas de Épernay y Metz, de 205 kilómetros, en la que el
suizo Fabian Cancellara sigue líder.
El joven Sagan fue el más rápido en esta
accidentada etapa, en la que se libró de las caídas, en las que sí
estuvieron involucrados dos de sus principales rivales.
El alemán André Greipel (Lotto), segundo
este viernes y que cayó en dos ocasiones, y el británico Mark Cavendish,
que llegó retrasado al caer a 24 kilómetros para la meta.
Precisamente en esa última “montonera”
también estuvieron afectados varios favoritos a la clasificación
general, entre ellos, el luxemburgués Franck Schleck (RadioShack), el
canadiense Ryder Hesjedal (Garmin), el holandés Robert Gesink y el
español Alejandro Valverde.
El luxemburgués y el español cedieron en
meta 2:09 respecto al primer grupo donde se encontraban el británico
Bradley Wiggins (Sky), el australiano Cadel Evans (BMC) y el español
Samuel Sánchez (Euskatel), entre otros.
El comienzo de la jornada fue tranquilo,
como toda la semana, a la espera de la montaña. Nada más darse la salida
un grupo de aventureros, el estadounidense David Zabriskie (Garmin), el
italiano Davide Malacarne (Europcar), el belga Romain Zingle (Cofidis) y
el holandés Karsten Kroon (Saxo Bank) probaron suerte.
No obstante, en ningún momento tuvieron
opciones de victoria y más con la lucha y tensión que hubo atrás por lo
que fueron reducidos a falta de un kilómetro para la meta.
El Tour vivirá este sábado la primera
cita con la montaña, una etapa con final en el alto de la Planche des
Belles Filles, en el macizo de los Vosgos, un final inédito con el que
los organizadores quieren dar la sorpresa.
Los casi seis kilómetros del ascenso, con
un desnivel medio del 8,5 por ciento, pero con rampas superiores al 13
por ciento, catalogados de primera categoría, suponen la primera cita
para los auténticos escaladores, el primer punto de la edición en el que
habrá que recurrir a los desarrollos de montaña.
Será el punto culminante de una etapa con
199 kilómetros y que, antes de La Planche des Belles Filles obligará al
ascenso de dos puertos de tercera categoría, el segundo de ellos a 43
kilómetros del pie de la cima definitiva.
El primer final en alto constituye el
inicio de la dureza del Tour, ya que viene justo antes de la primera
etapa de alta montaña, que se disputará el domingo, y de la primera gran
contrarreloj, prevista para el lunes, víspera de la primera jornada de
descanso.
El Tour habrá comenzado ya las cosas importantes y, en el fondo, los Alpes aguardan para dictar su ley.
El eslovaco Peter Sagan (Liquigas) se
anotó este viernes su tercera victoria del Tour de Francia 2012 al
imponerse al esprint en la sexta etapa disputada entre las localidades
francesas de Épernay y Metz, de 205 kilómetros, en la que el suizo
Fabian Cancellara sigue líder.
El joven Sagan fue el más rápido en esta
accidentada etapa, en la que se libró de las caídas, en las que sí
estuvieron involucrados dos de sus principales rivales.
El alemán André Greipel (Lotto), segundo
este viernes y que cayó en dos ocasiones, y el británico Mark Cavendish,
que llegó retrasado al caer a 24 kilómetros para la meta.
Precisamente en esa última “montonera”
también estuvieron afectados varios favoritos a la clasificación
general, entre ellos, el luxemburgués Franck Schleck (RadioShack), el
canadiense Ryder Hesjedal (Garmin), el holandés Robert Gesink y el
español Alejandro Valverde.
El luxemburgués y el español cedieron en
meta 2:09 respecto al primer grupo donde se encontraban el británico
Bradley Wiggins (Sky), el australiano Cadel Evans (BMC) y el español
Samuel Sánchez (Euskatel), entre otros.
El comienzo de la jornada fue tranquilo,
como toda la semana, a la espera de la montaña. Nada más darse la salida
un grupo de aventureros, el estadounidense David Zabriskie (Garmin), el
italiano Davide Malacarne (Europcar), el belga Romain Zingle (Cofidis) y
el holandés Karsten Kroon (Saxo Bank) probaron suerte.
No obstante, en ningún momento tuvieron
opciones de victoria y más con la lucha y tensión que hubo atrás por lo
que fueron reducidos a falta de un kilómetro para la meta.
El Tour vivirá este sábado la primera
cita con la montaña, una etapa con final en el alto de la Planche des
Belles Filles, en el macizo de los Vosgos, un final inédito con el que
los organizadores quieren dar la sorpresa.
Los casi seis kilómetros del ascenso, con
un desnivel medio del 8,5 por ciento, pero con rampas superiores al 13
por ciento, catalogados de primera categoría, suponen la primera cita
para los auténticos escaladores, el primer punto de la edición en el que
habrá que recurrir a los desarrollos de montaña.
Será el punto culminante de una etapa con
199 kilómetros y que, antes de La Planche des Belles Filles obligará al
ascenso de dos puertos de tercera categoría, el segundo de ellos a 43
kilómetros del pie de la cima definitiva.
El primer final en alto constituye el
inicio de la dureza del Tour, ya que viene justo antes de la primera
etapa de alta montaña, que se disputará el domingo, y de la primera gran
contrarreloj, prevista para el lunes, víspera de la primera jornada de
descanso.
El Tour habrá comenzado ya las cosas importantes y, en el fondo, los Alpes aguardan para dictar su ley.
El eslovaco Peter Sagan (Liquigas) se
anotó este viernes su tercera victoria del Tour de Francia 2012 al
imponerse al esprint en la sexta etapa disputada entre las localidades
francesas de Épernay y Metz, de 205 kilómetros, en la que el suizo
Fabian Cancellara sigue líder.
El joven Sagan fue el más rápido en esta
accidentada etapa, en la que se libró de las caídas, en las que sí
estuvieron involucrados dos de sus principales rivales.
El alemán André Greipel (Lotto), segundo
este viernes y que cayó en dos ocasiones, y el británico Mark Cavendish,
que llegó retrasado al caer a 24 kilómetros para la meta.
Precisamente en esa última “montonera”
también estuvieron afectados varios favoritos a la clasificación
general, entre ellos, el luxemburgués Franck Schleck (RadioShack), el
canadiense Ryder Hesjedal (Garmin), el holandés Robert Gesink y el
español Alejandro Valverde.
El luxemburgués y el español cedieron en
meta 2:09 respecto al primer grupo donde se encontraban el británico
Bradley Wiggins (Sky), el australiano Cadel Evans (BMC) y el español
Samuel Sánchez (Euskatel), entre otros.
El comienzo de la jornada fue tranquilo,
como toda la semana, a la espera de la montaña. Nada más darse la salida
un grupo de aventureros, el estadounidense David Zabriskie (Garmin), el
italiano Davide Malacarne (Europcar), el belga Romain Zingle (Cofidis) y
el holandés Karsten Kroon (Saxo Bank) probaron suerte.
No obstante, en ningún momento tuvieron
opciones de victoria y más con la lucha y tensión que hubo atrás por lo
que fueron reducidos a falta de un kilómetro para la meta.
El Tour vivirá este sábado la primera
cita con la montaña, una etapa con final en el alto de la Planche des
Belles Filles, en el macizo de los Vosgos, un final inédito con el que
los organizadores quieren dar la sorpresa.
Los casi seis kilómetros del ascenso, con
un desnivel medio del 8,5 por ciento, pero con rampas superiores al 13
por ciento, catalogados de primera categoría, suponen la primera cita
para los auténticos escaladores, el primer punto de la edición en el que
habrá que recurrir a los desarrollos de montaña.
Será el punto culminante de una etapa con
199 kilómetros y que, antes de La Planche des Belles Filles obligará al
ascenso de dos puertos de tercera categoría, el segundo de ellos a 43
kilómetros del pie de la cima definitiva.
El primer final en alto constituye el
inicio de la dureza del Tour, ya que viene justo antes de la primera
etapa de alta montaña, que se disputará el domingo, y de la primera gran
contrarreloj, prevista para el lunes, víspera de la primera jornada de
descanso.
El Tour habrá comenzado ya las cosas importantes y, en el fondo, los Alpes aguardan para dictar su ley.
Freire abandona el Tour:
Óscar Freire tuvo que abandonar el Tour
de Francia al término de la sexta etapa entre Epernay y Metz tras verse
involucrado en una caída en el pelotón que afectó a varios ciclistas. El
ciclista del Katusha, aun teniendo la pleura perforada y una costilla
rota, consiguió llegar a meta en un ejercicio de pundonor ya habitual en
el cántabro, aunque tras realizarse unas pruebas en el hospital de
Nancy y comprobarse la lesión que sufre, su presencia en la selección
española que acudirá a los Juegos Olímpicos de Londres se ve seriamente
comprometida.
Al finalizar la etapa, Freire declaró
ante los medios que sentía molestias fruto del aparatoso golpe recibido,
antes de acudir al hospital para comprobar de qué se trataba: “Me caí
en la primera montonera y me duele bastante el costado, espero que no
sea nada. Iré al hospital a ver si tengo algo. Me duelen las costillas”.
Ese dolor en las costillas al que se
refería eran la perforación de la pleura y una costilla rota, por lo que
los médicos optaron por dejarlo ingresado. Freire estará tres días en
observación en el Hospital de Nancy, hasta que los médicos decidan
cuándo podrá regresar a su casa para continuar con la recuperación.