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Nico Denz gana la etapa 18 |
El retiro de Juan Ayuso siembra dudas en tono a su futuro. Isaac del Toro mantiene el liderato por decimo día consecutivo. Los favoritos a la espera de las dos siguientes jornadas de mucha montaña.Con una temperatura de 24 grados inicio en Morbegno la etapa 18 con 144 kms de recorrido y con final en Cesano Maderno. Un ojo hinchado y la moral baja llenan de incertidumbre a Juay Ayuso (UAD).
La jornada inicio con la búsqueda de la fuga y los puntos de los premios de montaña y de los sprints especiales.
Corredores del equipo Polti son los que buscan la fuga, aspiran ganar la etapa, mostrando su marca. Mads Pedersen intenta la fuga . El lote inicia el ascenso al premio de montaña de segunda categoría, el primero del dia, a Parlasco (7.6 kms al 5.8%)m 18 corredores escapados, el lote, que lo cierra el español Juan Ayuso, a 1'.Mateo Moscuettti y Edoardo Affini se quedan del pelotón principal. Scaroni suma 18 puntos mas en la montaña al pasar primero.
a 109 kms del final , Ayuso se sube al coche del director afectado por una picadura de abeja en su ojo izquierdo, fiebre y bajo en su moral, uno de los favoritos de UAD para la victoria final. La bici te pone en el lugar...Una picadura de abeja y un ojo hinchado .El incidente ocurrió durante la etapa de ayer, donde Ayuso se vio obligado a bajarse de la bicicleta. Al cabo de más de media hora llegó en el puesto 141.
En la carrera, Pedersen gana el sprint especial de Primaluna. Se viene el premio de montaña de tercera categoría en Colle Balisio (4.6 kms al 3.3%) ganado por el italiano Christian Scaroni (XDS Astana). La fuga lleva 3'15" al pelotón de los lideres.
Los 33 escapados tiene libertad e incrementan la ventaja sobre el pelotón principal 5'41" a menos de 76 kms de la llegada.
Pedersen, Van Aert, Groves, los velocistas en la fuga. Pedersen sigue dominando en la clasificación de los puntos y suma más al paso del sprint en Galbiate.7'17" la diferencia al pelotón, que hoy da tregua.
En el sprint bonificado en Sirtori ,Martin Marselucci gana los 6" seguido de Manuelle Tarozzi y Remy Rochas. El pelotón guiado por EF Easy Post a mas de 10 minutos.
A 40 kms del final se fragua la fuga de la fuga , 11 ciclistas por la gloria del dia ingresan al primer circuito de los dos previstos en
Cesano Maderno. El alemán Nico Denz (Red Bull -Bora) el que mejor rueda en el circuito urbano y arriba destacado a la meta en 3h12' 07".
Sin cambios en el top 10 con Del Toro por decimo dia consecutivo portando la maglia rosa.
La etapa 19, con 166 kms se corre entre Biella y Champoluc. se disputaran 5 premios de montaña, 3 de primera, uno de segunda y otro de tercera categoría. Mucha montaña y el show será espectacular.
Giro de Italia - Etapa 19 (Previa)
CHARLA TECNICA EN EL EQUIPO DE CARAPAZ--
Muchachos, hoy salimos de Biella. Ciudad de lana, sí, pero también de pecados tejidos con aguja fina.
A los turistas les venden historia y devoción, pero no saben que esta tierra tiene el hábito de tragar hombres.
Al pie de esas colinas hay una basílica donde la Madonna Nera —esa señora que lo ha visto todo y no cuenta nada— nos observa desde hace siglos. Hoy nos mira a nosotros. No va a intervenir. Las vírgenes no bajan a ayudar a ciclistas.
Hace siglos, la gente subía descalza esa cuesta, con cilicios en las piernas y miedo en el alma. Ustedes van con potenciómetros y neumáticos tubeless, pero créanme: el dolor es el mismo. Cambiaron los artefactos, no la penitencia. En el fondo, seguimos pagando por querer estar un poco más arriba que el otro.
Hoy tenemos cinco puertos. No son cinco subidas, son cinco oportunidades de perder el Giro. La primera, Croce Serra, es como esos tipos que entran al bar y parecen simpáticos hasta que te das vuelta. Once kilómetros que no dicen nada, pero desgastan como un mal matrimonio. Ahí no se gana nada, pero se empieza a perder la moral.
Después viene el Col Tzecore. Dieciséis kilómetros al 7,7%. Una trampa con forma de montaña. Los últimos tres kilómetros tienen rampas del quince por ciento. Ahí se empieza a escribir la historia, con buena o mala letra. Si vas justo, se nota. Si vas fuerte, no lo digas. Carapaz, vos conocés ese lenguaje: el del tipo que no pregunta si duele porque sabe que duele. Vos no atacás, vos interrogás al rival hasta que canta. Hoy, si podés, hacelo cantar.
El Saint-Pantaléon es otra cosa. Nombre de mártir. Gente decapitada. Aire enrarecido. Y sí, también el dilema de siempre: atacar o rezar. Si están pensando en rezar, ya están muertos. No se reza con pulsómetro.
Y entonces aparece el Col de Joux. Ahí la carretera ya no perdona errores. Esa subida está hecha para ver si todavía hay hombres en el pelotón o solo simulacros. Si Del Toro llega hasta ahí con vida, no se lo espera. Se lo sigue, se lo estudia, y si flaquea, se lo hunde. Hoy no gana el que más sueña. Gana el que más aguanta con el cuchillo entre los dientes.
Después está Antagnod. Parece amable, pero es tan traicionero como un político en año electoral. La subida no preocupa. El problema es el descenso. Técnicamente jodido. Mojado si tenemos mala suerte. Si alguno quiere regalar el Giro, basta con dudar medio segundo en una curva. Ya vi carreras perderse por menos. El descenso es como la verdad: cuando se muestra, es demasiado tarde.
Y finalmente, Champoluc. Tejados de pizarra, humo de chimeneas, gente que te mira como si no le importaras. Ochenta metros de pavé para coronar cuatro mil de desnivel. Como si te obligaran a sonreír después del funeral de tu mejor amigo. Ahí se define todo. Si llegamos vivos, hay que llegar duros. Si Del Toro está delante, hay que hacerle sentir que el rosa pesa más en las piernas que en la espalda.
Y mientras pedalean, no se olviden de mirar alrededor. Los Alpes no hablan, pero anotan. Cada gesto, cada desfallecimiento, cada cobardía. Y si cruzan la meta, con los pulmones convertidos en piedra pómez y la mirada vuelta al revés, recuerden lo que decía el viejo Erasmo: In montibus libertas. La libertad está en la montaña. Pero hoy, la gloria está en saber sufrir sin dejar de pensar.
Nos vemos allá arriba. O no.