En una exhibición brutal, Pogačar atacó a 75 kilómetros de meta y voló en solitario rumbo al título europeo en la categoría élite masculina.



Con este triunfo, Tadej suma su novena gran victoria de la temporada, completando un año absolutamente histórico:











Un dominio pocas veces visto en el ciclismo moderno.
Isaac del Toro, su compañero en el equipo, fue de los primeros en felicitarlo: “¡Grande, capitán! Gracias por la inspiración que nos das a todos los latinos.”
En el pelotón, el respeto es absoluto.
En el corazón de los latinos, Pogačar ya es parte de nuestra historia, porque comparte el mismo sueño que Del Toro: llevar el ciclismo a lo más alto del mundo.
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